No podemos quedarnos callados

En estos días he leído en las redes sociales, como algunos manzanilleros han exigido, denunciado o planteado problemas que nos convidan a todos los nacidos en estas tierras, en cierto modo estoy feliz, porque las personas han cambiado, han dejado el viejo fantasma del miedo y se han cubierto del valor necesario para poder hacer tales exigencias.

Cómo manzanilleros ya lo he dicho anteriormente, es nuestro deber por todos los medios hacer algo por nuestra deteriorada ciudad, no podemos seguir comiendo mierda en las redes sociales, subiendo fotos y dando likes, mientras ocurren problemas que nos atañen a todos y cerrando los ojos a esos que tanto daño nos hacen de un modo u otro.

Cómo es posible que sigan desde Bayamo avasallandonos, que sigan tomando las riendas de nuestro destino como ciudad, que sigan imponiendo reglas sucias y estúpidas, que sigan imponiendo trabas a nuestro desarrollo como ciudad, como el caso del crucero que no acaba de atracar en nuestra costa, o cientos y cientos de historias que todos conocemos, muchas de ellas lamentables y tristes.

Hay que alzar la voz y bien alto, porque Manzanillo no puede seguir como esta, hay que luchar por todas las vías y no dejarnos engañar con falsos convencimientos y viejas doctrinas, es tu decisión de hacer la ciudad tuya.

Nostalgia por un carnaval

Llega otro carnaval a la ciudad, lamentablemente quizás sea está la única gran fiesta que tiene Manzanillo en todo el año, pero es la popular, la que agrupa a todos y que todos disfrutan por igual.

Recuerdo de niño que había más escasez de recursos en el país y los carnavales se realizaban con mejor factura, paso el tiempo y me hice un joven y por cosas del destino, un año una excelente persona, un excelente amigo, padre, director e intelectual manzanillero llamado Dionicio Ponce Ruiz, quien por suerte o desgracia la vida lo llevó lejos del país, me invita a formar parte del equipo que realizaría la esperada "Gala de apertura del Carnaval".

Manzanillo una ciudad que dentro del país, marco pautas en un pasado dorado por la realización y producción de galas de carnaval, recordadas todavía por su fastuosidad, diseño, ingenio y creatividad, y que luego de muchos años se trató de rescatar nuevamente de la mano de nuevas figuras en el ámbito manzanillero.

Fue Dionisio, entre otros, quien en muchos momentos asumió tal responsabilidad y en una de esas oportunidades entré yo; siempre fui puntual año tras año en dichas galas, pero saber de repente que formas parte del equipo de producción es toda una responsabilidad, y lo asumí como tal, participé junto a otro colega y amigo, ambos formábamos un pequeño equipo dentro del grande y nuestra tarea era apoyar el espectáculo de forma visual. Trabajos estos que iban desde animaciones visuales, videos complementarios y spots, que apoyaban cada cuadro artístico dentro del espectáculo.

Fueron varios años seguidos, varias galas y fue espectacular en lo personal, esos trabajos formaron en mí una actitud de responsabilidad y creció mi amor por Manzanillo, porque sabía que lo que hacía lo hacía por y para Manzanillo.

Lamentablemente los últimos años las galas han perdido calidad, ya las cosas no son como antes y cada año que pasa recortan desde Bayamo el presupuesto, e intentan imponer reglas ajenas a nuestras tradiciones, pero espero que las nuevas generaciones sepan sostener ese testigo que ha quedado en la memoria de muchos y qué forma parte de nuestra cultura manzanillera.

Mi hijo cumple tres años

Hoy es un día especial para mi pequeño príncipe y para mí también, hace tres años nació en contra de la voluntad de muchos pero llego al mismo tiempo para alegría de muchos más.

Nunca he dedicado mucho a hablar de el, lo reconozco pero he preferido que las cosas sean así, es demasiado pronto exponerlo a este mundo voraz y vil que es internet, su tiempo sin dudas llegará.

Jamás quería haber tenido un hijo en este país, lo reconozco, en medio de tantas necesidades y problema que van y vienen como vientos de tormentas, pero ahí está, tener un hijo era algo que me aterraba pero del mismo modo quería experimentar lo que era ser padre.

En todo este tiempo me he esforzado como quizás muchos no lo hayan hecho, y valga que si lo he hecho, muchos saben eso, pero sobre todo pensando siempre en una premisa que he tenido siempre presente, no quiero por ningún motivo que mi hijo tenga el mal recuerdo que yo tengo de mi padre, pues mi padre nunca fue lo que hubiera querido tener como tal.

En ocasiones he llegado cansado de trabajar y sin coger un diez, como decimos los cubanos he tenido que ponerme a jugar con mi hijo al fútbol o a la pelota, pues un niño no entiende de cansancio y en ese momento solo pienso en la felicidad de el, en esa carita alegre y en ese momento en el que sin pedírselo viene corriendo hacia uno y te abraza y te da un beso en la mejilla, ese es el verdadero amor de un hijo y yo lo amo, mi hijo es lo más importante que tengo, es hoy lo que me impulsa a seguir adelante en medio de situaciones difíciles. Hoy experimento ese sentimiento, hoy comprendo mejor a mi madre, quien siempre ha sido madre y padre para mí. También he aprendido otra cosa más, da todo por tu hijo(s) y nunca esperes nada a cambio, pues ese es el vínculo más profundo que tendrás hasta tu último respiro.

Regreso al señor de los anillos

Hace mucho tiempo no veía la espectacular trilogía de El Señor de los Anillos, por suerte para los amantes cubanos de esta serie de películas, este verano fue transmitida por uno de los canales de la televisión junto a su predecesora El Hobit y esta vez como las otras sentí el mismo sentimiento, algo extraño de describir pero cuando termina siento una tristeza profunda, porque de algún modo se acaba algo tan lleno de emociones y sentimientos que es difícil de comprender.

Soy un gran fanatico de los temas relativos a la Tierra Media, es algo de culto, tan apasionante y embriagador, que no me canso de ver esas películas, por suerte tengo la esperanza que un día puedan seguir el legado de Peter Jackson y puedan producir El Silmarillion, aunque hace pocos meses conocimos que Amazon produciría una serie de televisión basada en El Señor de los Anillos para suplir la ausencia final de Juego de Tronos, así que volveremos a viajar a ese fantástico universo que es la Tierra Media.

¿Se puede retomar el camino?

No se ni por dónde empezar, ..., realmente no lo sé, quiciera poder recuperar mi vida, regresar a aquel que fui de unos 10 años atrás, aquel inocente muchacho lleno de timidez, estoy cansando de esta vida que llevo, cansado de llevar una vida llena de mentiras para poder complacer y quedar bien con todos, no es fácil escribir estas líneas y tener las pelotas de publicarlo en internet, pero siento que debo hacerlo, en este punto no me importa lo que piensen de mí, ya he dado suficiente a todos, ¿cuando me van a dejar vivir?, quiciera poder recuperar el camino o mejor dicho volver al camino, porque ya no lo logro encontrar y estoy cansado de vagar, no es fácil pasarse gran parte de los buenos años de la vida sufriendo, las personas solo viven comentando sin saber que nos lleva a actuar de la manera en que lo hacemos, ¿sabes que hay dentro de mi? ¿sabes lo que pasa por mi cabeza cuando intento dormir? ¿sabes porque soy tan infeliz, lo sabes?, solo quiero explotar el castillo que he construido del cual cada uno de sus ladrillos es una mentira y lo peor es que fue la única materia prima que encontré y que tuve a mano.

Las molestias de algunos

Hace poco estuve en Manzanillo y para mí sorpresa sucedió algo a lo que ya me he acostumbrado, la molestia que muestran algunas personas cuando tú reclamas algo.

Pues bien no mencionaré nombres ni lugares, pues ya perdí una gran amistad por algo que comenté en mi blog, resulta que hace un tiempo atrás escribí sobre un asunto que está sucediendo en Manzanillo, en una determinada institución y ahora como comenté anteriormente, saludé a una amiga mía y esta cuestionandome sobre reclamaciones que he realizado y publicado en las redes sociales.

No entiendo como hay personas en mi país, que ha esta altura de la vida siguen viviendo en los años 80, personas a las que les molesta que uno haga reclamaciones ante lo lo que considero mal hecho, sé que quizás a muchas personas no debo caerle bien por mi forma de ser, pero a todas esas se los digo: "lo siento por ustedes", pero es algo que no puedo cambiar.

Siempre he compartido mis historias de mi preciado blog y ahora más con esto de las redes sociales, así que les digo a ellas si quieren vivir con las cosas malas es su problema yo no pienso hacerlo, lo malo hay que combatirlo y más cuando son asuntos que atañen a la sociedad de la que formamos parte todos.

La oportunidad que se desvanece

Vuelvo nuevamente a escribir de lo mismo, diría que llueve sobre lo mojado, pero no queda de otra callarse es peor que no hacer nada. Recuerdan que a principio de año hablé del tema de  las obras previstas en saludo al 150 aniversario del inicio de las luchas independentistas en La Demajagua, en aquel momento advertí desde este mismo espacio, el atraso que en esas primeras semanas del año ya existía, pues bien a pocas semanas del acontecimiento el atraso es peor.

Lo peor que sucederá ya lo conocemos de ante mano, el final maratónico que tendrá tal retraso constructivo en las obras proyectadas, las cuales seguro a las pocas semanas de inaugurada evidenciaran el mal trabajo y la chapucería, el problema radica en el mismo tema de siempre el monopolio dominante desde Bayamo.

Se supone que una fecha tan importante para los cubanos y en especial para los manzanilleros, deberían contar con un apoyo fuerte y palpable de los dirigentes del partido y del gobierno en la provincia de Granma, que en ocasiones dejan las cosas a manos de los dirigentes manzanilleros que no cuentan con los recursos ni la autonomía suficiente para la toma de decisiones, a esto súmele la maldita centralización sobre la que Bayamo ejerce su poderío en el territorio, como capital de una ficticia provincia.

Si querían un cambio, un renacer, un impulso para Manzanillo déjenme decirles que no está sucediendo, la ciudad sigue sumida en el abandono gubernamental y espiritual, hemos quedado como un barco a la deriva, digo más es casi un tema de conspiración contra Manzanillo, a veces pienso que es algo o alguien o algunos que no quieren vernos prosperar.