Ha pasado ya un tiempo desde que escribí por última vez, desde entonces muchas cosas han cambiado mi vida, dándole un nuevo giro al que pudiera describir como inesperado en cierto punto pero no del todo.
Ya hace casi 1 mes estoy viviendo con mi novia en la ciudad de Bayamo, sé que cierto lector mío residente en los Estados Unidos me tildará de traicionero, pero la verdad que con tantos problemas que he tenido en este año, pues no me quedaba otra alternativa que mudarme a esta ciudad, eso no significa que dejaré de luchar por la definitiva independencia de mi ciudad del yugo bayamés. Pero bueno retomando el hilo inicial de mi post, continúo diciendo que muchas cosas han cambiado en mi vida, estoy a punto de casarme, sí, como acaban de leer, pienso casarme y pronto, quizás a comienzos del nuevo año, y aún estoy preparándome psicológicamente para ese reto, puesto que sigo pensando que el matrimonio para mí es una simple esclavitud social, aunque también mi lado conservador lo ve como algo sagrado a lo que hay que respetar.
Así que me casaré con el propósito de durar muchos años, cosa esta que solo el destino podrá verificar con el paso de los años, yo nunca me he considerado alguien maduro, no me gusta ese concepto, ni me gusta la seriedad de muchos, tampoco la arrogancia de quienes han pasado toda su vida demostrando su virilidad en exponer su larga lista de premios sexuales. Algunas personas cambian con cada relación, pero mis cambios siempre han sido para adaptarme a esta nueva sociedad y en otros casos para tomar ciertas decisiones que cambian el curso de mi vida.
1 comentario:
Yo sé que tú nunca serás traidor. Eso se sabe de mirar al hombre a los ojos.
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