Las palabras que hieren

No es fácil escuchar palabras que te hieren de esas personas que más tú quieres, pero la vida es así no siempre las cosas son como cada cual quiciera que fueran, pero e aquí la vida, aceptar es el primer paso que nadar contra un río furioso.

Apuntes para un referéndum

Bueno en los próximos días Cuba vivirá por primera vez un proceso histórico, único y quizás irrepetible al menos pienso yo, se trata de la culminación de la reforma constitucional, un proceso que ha dado mucho de qué hablar en los últimos meses, no voy a entrar en detalles que ya se han comentado en varios medios, voy a referirme al mero hecho de ir a votar.

No sé si esto me cause problemas, porque en Cuba cualquier tema puede ser manipulado, tergiversado o malinterpretado, pero voy a correr el riesgo porque el tema lo amerita, es un día como ya dije muy importante para las nuevas generaciones, porque de aprobarse la nueva constitución, es a nosotros las nuevas generaciones quienes en mayor medida vamos a enfrentarla, por ello hago un llamado a que conscientemente cada uno de los cubanos y cubanas voten con el corazón, voten por lo que verdaderamente creen, voten por lo que piensen en su interior, no se dejen arrastrar por dogmas, imposiciones o miedo, si van a votar por el SI haganlo conscientes al igual de si lo hacen por el NO, voten por lo que verdaderamente creen.

Pero piensen en todo, si votan por el SI tengan presente que van a estar de acuerdo con todo, desde lo más simple hasta lo más controversial y si votan por el NO háganlo pensando en las cosas que quizás pidieron en las reuniones de consulta popular y no fueron aprobadas.

El futuro está en nuestras manos, no se queden en sus casas, vamos todos a votar, por el SI o por el NO, pero no nos quedemos nadie en casa sin participar. Espero que todos tomemos la decisión correcta.

Siempre escucha a tu voz interior

Hace muchos años, me encontraba en cierto lugar rodeado de personas, era una especie de fiesta, hubo un momento en aquel día que sentí como un susurro en mi oído, que me decía vete de ahí corriendo y no mires atrás, pero no lo hice y me quedé con la ilusión de llegar al final del día allí, hoy me arrepiento de no haberme ido corriendo.

Les digo esto porque esa voz, muchas veces nos alerta y nos convita hacer algo en nuestras vidas, muchas veces algo positivo y no le escuchamos, más bien la ignoramos y después como nos pesa, nos arrepentimos mucho.

Por eso amigos míos, siempre escuchen a su voz interior o lo que sea que eso signifique, su corazon, su conciencia, pero siempre hay algo que nos habla bajito al oído, no lo desprecien, estén atentos, como dice un dicho la suerte toca una sola vez a nuestras puertas.

Un mejor país

Que bueno sería despertar y no tener la preocupación de: ¿Qué voy a comer hoy?, vivir sabiendo que quizás tu salario no llegue a fin de mes, pero que no tienes que verte obligado a robar en tu trabajo para alimentar o vestir a tus hijos, no estoy justificando nada pero la situación actual en Cuba, ha obligado a muchos obreros a cometer tales hechos, ahora escucho mientras escribo estás líneas "Cada país" del grupo cubano Buena Fe y dice tanto esa canción...

Un mejor país lo podríamos construir entre todos, si tuviéramos la oportunidad de hacerlo, si escucharán los corazones del pueblo todos, no que hagan como que nos escuchan y terminen burlándose de todos nosotros, es doloroso pero estas cosas suceden en mi país a diario, desde la punta de la pirámide hasta sus cimientos.

¿Es tan difícil arreglar las cosas internas y externas?, no sé porque hay que sacrificar a todo un pueblo por una ideología en la ya nadie cree, porque pensar que la gente va a un desfile o a un acto y dice lemas, no significa que lo hagan desde sus corazones, en el fondo todos están cansado de lo mismo, de un futuro cada día más incierto, de ver más miseria que prosperidad, de ver más desigualdades sociales que su contrario,  de que nos traten mal en muchos lugares, de no recibir el trato correcto a la hora indicada.

Pero sigo teniendo algo de fe, en que de alguna forma, algún día y espero que no sea cuando ya me convierta en un anciano todo cambié para bien y en ese entonces entre todos, con nuestras verdaderas opiniones podamos construir eso que tanto anhelamos: un mejor país.

Miedo e injusticias

Últimamente me he horrorizado al ver situaciones que se están dando en la sociedad cubana, llenas de injusticia por parte de autoridades, llenas de abuso de poder, de amenazas, de xenofobia, entre otras.

Pero lo peor de todo esto no es que se estén dando, sino que a nadie le importa, las personas solo se paran a mirar como suceden los hechos, pero nadie se mete, nadie sale al paso, nadie dice nada, solo unos pocos valientes que sienten con dolor lo que está sucediendo, solo unos pocos que se enfrentan ante lo mal hecho, amén de que luego pueden verse envueltos en situaciones desfavorables para ellos, nos hemos vuelto un pueblo demasiado conformista con todo, un pueblo que ha perdido la esperanza, un pueblo que a pesar de estar cansado de lo mismo no hace nada para cambiar su estado, un pueblo sumiso a todo, donde el miedo ha penetrado en cada rincón y en cada persona.

No estoy insitando a nada y mucho menos a qué se inmolen, que sería lo ideal, pero no dejen que el miedo los invada cuando estén en presencia de injusticias, pónganse una mano en sus corazones y sientan tales injusticias como suyas, injusticias que pueden ser del tipo que sean y que pueden pasarles a ustedes o sus familias, ya de por si hay demasiadas injusticias en el mundo, no permitamos que este mal se siga expandiendo, nuestros hijos merecen un lugar y un futuro mejor para vivir.

El Titanic yace en el fondo del mar

Prácticamente desde que nací estoy escuchando lo mismo, las mismas personas que siguen ilusionadas a que un día todo cambiará, la misma frase de siempre tan repetida por tantos: no hay mal que dure..., y seguimos aquí, como dice una canción estamos aquí como peces aburridos, ilusos y tontos somos, eso sí.

No es ahora que no tenemos pan o falta el aceite, hace mucho, pero mucho ya que chocamos con el iceberg, solo que algunos siguen empecinados en seguir sacando el agua y taponeando el hueco, con la estúpida ilusión de que finalmente y después de tantos años el barco llegará a su destino, pero este barco, el nuestro hace mucho que está hundido y no precisamente en el Atlántico, más bien creo yo que en las profundidades de la fosa de las Marianas.